Los compradores de hoy esperan que su experiencia de compra sea fluida y sin problemas. Quieren dejarse inspirar y encontrar el artículo exacto que buscan. No quieren esperar por nada. Uno de los desafíos más habituales del retail es el momento del pago. Esto puede influir negativamente en la experiencia de compra general porque la paciencia de los clientes a la hora de esperar para pagar está disminuyendo.
Muchos retailers están optimizando sus procesos del punto de venta (POS) para evitar colas. Las nuevas aplicaciones de pago que convierten los dispositivos móviles en un POS móvil (mPOS) pueden parecer el santo grial, pero también aumentan el riesgo de robo. ¿Cómo pueden los retailers implementar la tecnología mPOS y, al mismo tiempo, evitar que sus niveles de pérdidas se disparen?
Un número significativo de retailers ya está desplegando soluciones mPOS o experimentando con ellas para aumentar su flexibilidad y agilizar el procesamiento. Un ejemplo conocido de un retailer que utiliza una forma de mPOS es Decathlon. Los clientes utilizan sus propios teléfonos móviles para pagar los artículos. ¿Lo mejor de todo? No se activa ninguna alarma cuando salen de la tienda. Mira el siguiente vídeo:
Aunque los retailers utilizan los mPOS principalmente por la comodidad para el cliente, también ofrecen otros beneficios interesantes:
Reflejan la experiencia online. Cuando las personas compran en tiendas físicas, esperan que el proceso de pago sea tan rápido como con las compras online. De hecho, los compradores ya no comprenden que existan incoherencias entre las compras online y físicas.
Flexibilidad. El número de mostradores del punto de venta ya no es fijo, sino que puede depender de la demanda. Esto también permite al personal de la tienda dedicar más tiempo a atender a los clientes. Ya no tienen que emplear personal en los mostradores de los puntos de venta y los retailers obtienen un espacio de venta adicional.
Información. Los compradores visitan las tiendas cada vez más informados e incluso buscan ofertas competitivas mientras compran. Al equipar a los empleados de la tienda con dispositivos móviles, los retailers pueden asegurarse de que el personal tiene toda la información vital de los sistemas de gestión de retail al alcance de la mano.
Venta cruzada y omnicanal. Con todos los datos a mano, los miembros del personal pueden asesorar fácilmente sobre los productos disponibles, verificar los niveles de stock en otras tiendas y ayudar a los clientes a realizar un pedido online en el acto antes de que se marchen para ir a la siguiente tienda.
Si bien las numerosas ventajas de las soluciones mPOS hacen que sea tentador deshacerse de las cajas tradicionales, es necesario superar antes ciertos desafíos. Uno de los temas clave es la prevención de pérdidas, ya que existe un gran conflicto entre las soluciones de mPOS y las medidas de prevención de pérdidas implementadas por el retailer. Un porcentaje significativo de los retailers utiliza etiquetas de seguridad para proteger sus productos; ya sean etiquetas rígidas adheridas o etiquetas blandas incrustadas en los productos.
Este es un factor limitante importante en el despliegue de soluciones de pago móvil debido al paso necesario de desconexión o desactivación. Es comprensible que los retailers opten cada vez más por priorizar el servicio al cliente y la experiencia en detrimento de la seguridad. Como consecuencia, quienes adoptan soluciones mPOS suelen eliminar las medidas de seguridad. Por lo general, lo consideran aceptable en ciertas tiendas insignia pero, para un despliegue en toda la cadena, existen serios riesgos de seguridad que generalmente impiden una adopción más amplia de soluciones de pago móvil. Podría decirse incluso que existe un dilema real en el que los retailers deben preguntarse si anteponer el servicio al cliente o las medidas de seguridad.
El código de producto electrónico (EPC) y la RFID introducen una tercera opción que permite a los retailers combinar comodidad y seguridad al conectar las soluciones mPOS con los sistemas de prevención de pérdidas basados en RFID. Para ello, el EPC, que identifica un producto único en una capa más profunda que los códigos de barras tradicionales, actúa como el identificador común.
Etiqueta RFID que incluye DataMatrix y EAN + código de serie
Este código EPC proporciona el código EAN o UPC para la identificación del producto, además de un número de serie único que define el producto específico. Los retailers pueden imprimir el código EPC requerido como un código de barras DataMatrix GS1 (similar a un código QR) en una etiqueta RFID. Un empleado o el comprador escanea este código de barras con un dispositivo móvil.
Puesto que la comodidad es clave en las soluciones mPOS, es lógico seleccionar etiquetas RFID para este tipo de solución en lugar de etiquetas rígidas RFID. Si los clientes pagan en un mPOS, es complicado incluir un paso de desactivación. El personal de la tienda no puede llevar consigo un imán para quitar las etiquetas rígidas y es bastante engorroso atender a los clientes de inmediato si luego deben pasar por un mostrador fijo para quitar las etiquetas rígidas. Un dispositivo móvil o un escáner de códigos de barras 2D escanea el GS1 DataMatrix de las etiquetas RFID.
La identificación de los productos a la salida también permite indicar qué producto ha generado una alarma y, por tanto, proporcionar más información a los guardias de seguridad y/o los empleados de la tienda. Los guardias de seguridad pueden realizar una investigación más específica y los artículos que faltan se pueden reponer más rápido. La información permite a los retailers darse cuenta del robo de un artículo al instante y no semanas o meses después durante el siguiente ciclo de recuento. Como todas las transacciones se basan en el nivel de artículo, también es posible registrar qué artículo único compró el cliente. Para evitar el fraude en las devoluciones, ya no es necesario un recibo, ya que la etiqueta RFID contiene la prueba.
Si bien lo anterior puede parecer complicado de implementar, es más fácil de lo que crees.
Los principales elementos para cubrir los procesos relevantes de la tienda son:
Al adoptar soluciones mPOS, los retailers pueden mantener al personal de la tienda conectado con todo el ecosistema de retail a fin de crear una imagen de marca coherente, experiencias de compra agradables y, en última instancia, reforzar la fidelidad del cliente.
Sin embargo, los mPOS representan tradicionalmente una amenaza para las medidas de seguridad del retailer. La tecnología RFID ofrece una solución sencilla y fácil de implementar para combinar lo mejor de ambos mundos. Los retailers pueden rastrear qué artículos se venden. Cualquier artículo que no se haya vendido activa una alarma a la salida de la tienda gracias a la etiqueta RFID con GS1 Datamatrix adherida a sus artículos. Esto permite a los retailers utilizar una solución mPOS escalable y fácil de usar que no entra en conflicto con las políticas de prevención de pérdidas de toda la cadena.